26 de febr. 2011

Fragmentos del Libro EL ELEMENTO

“Todos nacemos con grandes talentos naturales, y a medida que pasamos más tiempo en el mundo perdemos el contacto con muchos de ellos. Irónicamente, la educación es una de las principales razones por las que esto ocurre.
El resultado es que hay demasiada gente que nunca conecta con sus verdaderos talentos naturales y, por tanto, no es consciente de lo que en realidad es capaz de hacer.
En este sentido, no saben quiénes son en el fondo.”

“La mayoría de la gente tiene una percepción muy limitada de sus propias capacidades naturales Esto es así en varios sentidos.
La primera limitación está en nuestra comprensión del alcance de nuestras posibilidades. Todos nacemos con una capacidad extraordinaria para la imaginación, la inteligencia, las emociones, la intuición, la espiritualidad y con conciencia física y sensorial. En la mayoría de los casos solo utilizamos una mínima parte de estas facultades, y algunas personas no las aprovechan en absoluto. Hay mucha gente que no ha descubierto su Elemento porque no conoce sus propias capacidades.
La segunda limitación está en nuestra comprensión de cómo todas estas capacidades se relacionan entre sí de forma integral. Por lo general, creemos que nuestra mente, nuestro cuerpo y los sentimientos y las relaciones con lo demás funcionan de manera independiente, como sistemas separados. Muchas personas no han encontrado su Elemento porque no han entendido su carácter orgánico.
La tercera limitación está en nuestra escasa comprensión del potencial que tenemos para crecer y cambiar. Generalmente, la gente parece creer que la vida es lineal, que nuestras capacidades menguan a medida que nos hacemos mayores y que las oportunidades que desaprovechamos las perdimos para siempre. Muchas personas no han encontrado su Elemento porque no comprenden su permanente potencial para renovarse.”

Aquí entra uno de los factores más importantes para todo el mundo La Educación

“En todas partes me encuentro con estudiantes que se preguntan qué harán en el futuro y que no saben por dónde empezar. Encuentro a padres preocupados que intentan orientarlos, aunque a menudo lo que hacen es alejarlos de sus verdaderas aptitudes porque dan por sentado que para alcanzar el éxito sus hijos tienen que seguir caminos convencionales”…

“A algunas de las personas más geniales y creativas que conozco no les fue bien en el colegio”…

“¿Cómo eres de inteligente?”

“La opinión general dice algo así: todos nacemos con cierta cantidad de inteligencia. Es una particularidad, como tener los ojos verdes o azules, o tener las extremidades largas o cortas. La inteligencia se manifiesta en ciertas actividades, especialmente en las matemáticas y en la manera de utilizar las palabras. Es posible medir cuánta inteligencia tenemos mediante cuestionarios de lápiz y papel, y expresarlo con dígitos: Ya está.”
Espero que, dicho de un modo tan contundente, esta descripción de la inteligencia suene tan discutible como en realidad es. Pero en esencia esta descripción aparece en gran parte de la cultura occidental y buena parte de la oriental. Se encuentra en el centro de nuestros sistemas educativos y sostiene buena parte de la multimillonaria industria que se dedica a la preparación y elaboración de exámenes y que vive de la educación pública en todas las partes del mundo. Se encuentra en el centro de la noción de habilidad académica, domina los exámenes de acceso a la universidad, sostiene la jerarquía de asignaturas en la educación y representa la base del concepto de coeficiente intelectual.”

“La cuestión es que la mayoría de los sistemas educativos de masas se crearon hace relativamente poco, en los siglos XVIII y XIX, y se diseñaron para responder a los intereses económicos de aquellos tiempos, marcados por la Revolución Industrial en Europa y en Norteamérica. Las competencias en matemáticas, ciencias y lenguas eran imprescindibles en las economías industriales. La cultura académica en la universidad, propensa a dejar a un lado cualquier tipo de actividad que implique el alma, el cuerpo, los sentidos y buena parte del cerebro, también ha ejercido gran influencia en la educación.
La consecuencia es que en todas partes los sistemas escolares nos inculcan una visión muy reduccionista de lo que es la inteligencia y la capacidad personal, y sobrevaloran determinadas clases y habilidades. Al hacerlo, descuidan otras igual de importantes y desdeñan su importancia para mejorar nuestras vidas, en el plano individual y en el colectivo. Esta aproximación a la educación, estratificada e igual para todos, margina a aquellas personas que no están preparadas por naturaleza para aprender en ese marco.”

“¿De que modo eres inteligente?”

“La pregunta correcta es esta.”

“Saber que la inteligencia es diversa, dinámica y peculiar permite abordar la cuestión de una manera distinta. Este es uno de los componentes fundamentales del Elemento. Pues cuando eliminas las ideas preconcebidas sobre la inteligencia, puedes empezar a percibir tus diferentes formas de inteligencia. Nadie es solo una simple puntuación intelectual o una escala lineal.”

El libro aborda diferentes y múltiples formas de inteligencia que se muestran en nuestra experiencia cotidiana.

Estos fragmentos pertenecen al primero y segundo tema del libro que se divide en once temas igual de interesantes y explicados con la misma sencillez a través de las historias de personas que han encontrado su Elemento.






Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada